ESTELA DE ABAJO, LA MAESTRÍA DE UNA BUENA PROFESIONAL

Estela de Abajo, heredera de un negocio familiar, lidera uno de los centros de más éxito de Asturias. El rigor, la excelencia y la profesionalidad son los valores sobre los que se asienta este centro y que avalan su trayectoria de 45 años. Entrevistamos a su directora para que nos hable de un concepto de la estética con mucho futuro basado en el bienestar y la honestidad.

Eres la segunda generación al frente de tu centro de belleza, ¿por qué decidiste continuar con la labor de tu familia?  ¿Lo tenías claro desde pequeña? 

Siempre me gustó el mundo de la estética, pero lo cierto es que al principio ni quería ni me planteaba trabajar en el negocio familiar. Pero al final, ni siquiera sé muy bien cómo, la vida me condujo hasta donde estoy y jamás, ni en mis mejores sueños, imaginé que fuera a llenarme tanto. 

•¿Cómo iniciaste tu carrera?  

Estudié Estética cuando ya estaba en la universidad, por si acaso en algún momento de la vida fuera a necesitar tener conocimientos de ese sector, dado que mi familia tenía un centro de belleza. 

Durante la carrera, soy fisioterapeuta, me fascinaron los masajes, y alguna otra técnica, como el drenaje linfático manual.  Poco tiempo después comenzaba la fisioestética en España, e hice ese postgrado, que encajaba en mi perfil como anillo al dedo. Parecía que lo hubieran creado para mí. Me enamoró, y tras unos años dedicándome a la enseñanza, de estética y masaje, volví a mi Asturias, y empecé a trabajar en Estela Belleza. 

¿Cuáles son los tratamientos que más os demandan? 

No somos un centro al que la gente acuda pidiendo un tratamiento concreto, más bien vienen buscando solución a algo que no les gusta, o que quieren mejorar. Pero, sobre todo, acuden a nosotros en busca de asesoramiento profesional honesto, realista.  Cada vez más, las personas se están dando cuenta que, aunque de temas de belleza hable todo el mundo y en todas partes, lo más sensato es consultar con un profesional.  

¿Y vuestro tratamiento emblema? 

El tratamiento o servicio que más alegrías nos ha dado en toda nuestra trayectoria es la limpieza facial. Sí, un servicio tan básico y aparentemente sencillo, que ha conseguido fidelizar a miles de clientes y a su vez atraer a muchos otros.  Una piel limpia es la base de cualquier tratamiento.  Sin una higiene facial minuciosa previa, ningún servicio, por muy sofisticado o innovador que sea, tiene sentido. 

¿Crees que vuestra clientela valora vuestro trabajo?  ¿Aprecian vuestra experiencia y formación? 

No es que lo crea, es que lo sé, porque así nos lo manifiestan. El público cada vez es más exigente, cada vez tenemos menos tiempo, y queremos invertirlo en lo seguro.  Lo mismo económicamente hablando, quienes destinan parte de sus ingresos a tratamientos de belleza quieren obtener a cambio lo mejor. Tengo la suerte de tener un gran equipo a mi lado, que hacen que esto sea posible.  Una no puede saber de todo, o al menos yo no, por eso creo firmemente en la especialización y en las #chicas estela.  

Uno de los puntos fuertes de cualquier centro es la formación, además de los  cursos  de  reciclaje  impartidos  por  las  marcas  de  vuestra  confianza, ¿seguís  otro  tipo  de  formación?  

Por supuesto, desde formaciones de especialización en técnicas específicas, por ejemplo, drenaje linfático, hasta cursos imprescindibles hoy en día, como los de cosmetología.  También de otros aspectos relativos a la empresa. Personalmente, también me esfuerzo en cuidar de mí misma, el crecimiento personal es clave en el buen funcionamiento de todo negocio, así que también invierto en él.  

¿Qué importancia tienen las redes sociales para vosotros?  ¿Es una ampliación de la comunicación centro-cliente, funciona como un reclamo…? 

Las redes sociales tienen un peso importante en Estela. Lo que comenzó poco a poco, como obligación, al igual que en su día llegó el primer ordenador al centro, o el primer datáfono… se ha convertido en un tema de peso e importante en nuestro día a día.  Permite mantener informados a nuestros clientes actuales o futuros clientes de nuestro día a día, de las novedades, o incluso de las opiniones de otros clientes a cerca de nosotros y nuestro servicio. 

Te muestras muy activa en redes sociales y eres muy cercana compartiendo tus pensamientos sobre tu trabajo, ¿qué reacciones recibes de tus seguidores? ¿Te permite crear un mapa de los intereses y necesidades de tu clientela?  

Tengo una relación muy directa con mis seguidores, la mayoría son clientes, que es a quienes realmente hablo y quiero llegar, y cada vez más, también gente del sector. Pese al gran esfuerzo que conlleva, la verdad es que me da muchas alegrías, disfruto haciéndolo, y el feedback es muy positivo.  Se saca mucha información, y permite ver claramente dónde están los mayores intereses de los clientes. 

¿Qué es lo que más te gusta de tu trabajo? 

Lo que más me gusta es lo feliz que puedes llegar a hacer sentir a las personas.  Por eso, estoy tan “enganchada”, indescriptible las sensaciones cuando alguien te dice que le has cambiado la vida, o que conocernos es de las mejores cosas que le han pasado en la vida, o que ya es capaz de mirarse al espejo y encima se gusta… Trabajar con personas y hacerles la vida más fácil y bonita es lo que más me gusta. 

¿Cuál es tu concepto de la belleza? 

Todos estos años en este mundo, me venía una frase a la mente:  belleza con cabeza.  Y ese es mi concepto de belleza, una belleza real, natural, la nuestra, la que todos podemos tener. 

Una belleza lejos de las modas que nos marca la sociedad, una belleza destinada a resaltar todo lo bonito que tenemos, y a intentar mejorar lo que menos nos gusta.  No quiero luchar por una belleza inalcanzable, ni ir en contra el envejecimiento.  Quiero y lucho cada día por una belleza que nos haga sentirnos felices, y bien con nosotros mismos, y así es imposible no brillar. 

Vuestro centro cumple 45 años, ¿cómo vais a celebrarlo?  

Es un orgullo mantener un negocio durante tanto año, hace poco leía que el 80% de las pequeñas y medianas empresas fracasan antes de los 5 años, y que el 90% no llegan a los 10.  Así que, para nosotros todos los días son motivo de celebración. Pero sí, por supuesto, queremos agradecer a tanta gente que nos ha acompañado en este bonito camino y por eso a partir del 14 de noviembre y hasta final de año, habrá muchas sorpresas.  Así que, atentos a nuestras redes sociales.