Las últimas tendencias en cosmética #mesoestetic

Los principios activos más utilizados por la industria estética estos últimos años son el DMAE, que proporciona un efecto lifting inmediato visible, el ácido hialurónico de bajo peso molecular, que favorece la proliferación de fibroblastos y estimula la formación de elastina además de hidratar y aportar elasticidad a la piel, el silicio, que estimula la producción de colágeno y elastina mejorando la firmeza y elasticidad de la piel, y el resveratrol procedente de la uva, una molécula muy utilizada por su gran acción antioxidante.

Uno de los activos usados más recientemente y que forman parte de lo que se denomina ‘la cosmética inteligente’ son los péptidos biomiméticos. En nuestras células de la piel se encuentran de forma natural los péptidos que, entre otras actividades, actúan en la regeneración natural del colágeno. Con la edad, esa regeneración natural se ralentiza dando lugar a una piel envejecida. Para cubrir esta necesidad, han aparecido los péptidos biomiméticos, moléculas sintéticas que mimetizan la actividad de las naturales, y que se están convirtiendo en elementos claves de los tratamientos antievejecimiento.

Además de los activos citados, cada vez más, los laboratorios farmacéuticos especializados en dermocosmética como mesoestetic, desarrollan complejos personalizados que combinan activos que actúan sinérgicamente con biovectores de liberación específica. Estos biovectores vehiculizan y liberan el complejo de activos “inalterado” en el núcleo celular, asegurando así su eficacia máxima. Es el caso, por ejemplo, de la línea radiance de mesoestetic, formulada con [meso]recovery complex®. Se trata de un complejo de activos encapsulados en biovectores que imitan en su composición y estructura a la membrana celular, permitiendo actuar en las capas más profundas de la piel.

Otra tendencia en la industria estética es la mejora de la eficiencia del producto utilizando el ciclo de nuestro metabolismo natural. La crema de noche de la línea radiance DNA utiliza el estado de reposo natural de la piel para reajustar durante el sueño el mecanismo de reparación celular. Su fórmula incluye un tetrapéptido de última generación que sincroniza el reloj biológico de la célula, mejora la protección y reparación del ADN y prepara la piel para nuevos periodos de actividad.