Tres expertas en medicina estética advierten sobre los riesgos del Glovo-tox

Con el término Glovo-tox, nos referimos a esos tratamientos de medicina-estética que se efectúan a domicilio. Según los últimos datos facilitados por la Sociedad Española de Medicina Estética (SEME), hay motivos para preocuparse. De todo ello, hablamos con las Dras. Natalia Ribé, Carla Barber y Sofía Ruiz del Cueto.

“Un 28% de las personas que se someten a tratamientos médico-estéticos reconocen haberlo hecho en peluquerías y, sobre todo, en servicios a domicilio. De estos, un 6% de los encuestados no sabe indicar quién aplica dichos tratamientos. Por ello, consideramos que un 60% de los profesionales que los realizan solo son esteticistas. Son datos extraídos del último informe de la SEME”. Quién habla así es la Dra. Natalia Ribé, fundadora deL Institut Dra. Natalia Ribé. Los porcentajes son “alarmantes”, en opinión de la Dra. Ribé, sobre todo porque se fomenta el intrusismo y pone en riesgo la eficacia y seguridad de los tratamientos. “Se generan problemas en la salud pública (efectos adversos), desprestigiando la imagen y credibilidad de la medicina estética”, avisa Ribé.

A este intrusismo, con consecuencias directas sobre la salud de las personas, se le conoce como Glovo-tox, por motivos obvios. De hecho, un 10% de la población de nuestro país considera “normal” hacerse tratamientos de medicina estética en casa.

Cómo evitar el Glovo-tox

Desde el Institut Dra. Natalia Ribé insisten en la importancia de acudir a centros autorizados con sello U.48 que otorga la Sociedad Española de Medicina Estética. “Este sello garantiza que contactamos con profesionales médicos rigurosos. Solo el personal médico puede realizar tratamientos de medicina estética. Estamos preocupados por el intrusismo laboral con consecuencias directas sobre la salud de los pacientes”, subraya Ribé.

Concienciar al paciente

A finales del pasado mes de mayo, Francia prohibió las inyecciones de ácido hialurónico sin prescripción médica. Con esta medida, el país vecino quiere garantizar que los profesionales médicos calificados sean los únicos autorizados a realizar estos procedimientos. Una medida muy bien acogida entre las expertas en medicina estética consultadas, aunque creen que lo fundamental es concienciar a los pacientes. “Además de una legislación más estricta, debemos abogar por la educación y concienciación de los pacientes. Es básico que estén bien informados acerca de los procedimientos estéticos y los riesgos que implican”, opina la Dra. Sofía Ruiz del Cueto, cofundadora y codirectora de la Clínica Mira + Cueto.

“El profesional debe adoptar-continúa- unas condiciones de asepsia e higiene que únicamente se pueden llevar a cabo en un centro sanitario”. Transmitir que estos procedimientos se pueden realizar en un domicilio, resta profesionalidad e importancia a estos tratamientos, según Ruiz del Cueto. “Sin duda, puede dar pie a una frivolización del tratamiento y fomentar el intrusismo”, advierte.

Una opinión que también comparte la Dra. Carla Barber, fundadora de las clínicas Barber: “Debemos inculcar que la medicina es una profesión que solo se puede ejercer una vez superas los estudios. Es necesario cumplir una serie de requisitos para ser considerado médico-estético. Solo por ello, no se debería dejar la salud en manos de alguien que haga tratamientos en un espacio ajeno a un centro sanitario. Son procedimientos seguros, pero pueden surgir complicaciones y debemos contar con los medios necesarios para frenarlas”.

La formación, la búsqueda de la excelencia, la regulación nacional y europea y la labor que desarrollan las sociedades médicas y los colegios profesionales, siguen siendo las mejores bazas para plantar cara al intrusismo, en opinión de la Dra. Ruiz del Cueto: “Creemos en la medicina estética basada en la evidencia científica, que no se deja llevar por modas, con continuidad, pero sin procedimientos innecesarios. Eso sí, siempre con tratamientos adaptados a todas las edades y personalizada al detalle”.

Anna León
Redactora jefe de Vida Estética & Spa